Las vacaciones son ese momento ansiado por todos donde se abre paso a la relajación y el disfrute de nuevas experiencias, culturas y aventuras. Sin embargo, los aspectos culinarios pueden transformarse en el peor enemigo mientras viajas. Para que esto no suceda, te ofrecemos los mejores consejos para comer de manera saludable mientras viajas.
1. Investiga sobre tu próximo destino
Las bondades culinarias son una buena parte de cada cultura. Y si te sorprendes con menús poco agradables es porque no realizaste un buen análisis previo sobre lo que tienen para ofrecer los diferentes rincones turísticos.
Antes de viajar, investiga los restaurantes locales que ofrecen opciones saludables. Busca lugares que sirvan ensaladas frescas, platos a base de vegetales y proteínas magras. Además, considera llevar contigo algunos snacks saludables, como frutas frescas, frutos secos o barras de cereales, para tener opciones saludables a mano cuando estés en movimiento.
2. Opta por opciones frescas y locales
Cuando estés explorando un nuevo destino, aprovecha la oportunidad para probar los productos locales frescos. Visita mercados de agricultores o tiendas de comestibles locales y elige frutas, verduras y productos lácteos frescos. Estos alimentos no solo son más saludables, sino que también te permiten experimentar la cultura culinaria del lugar que estás visitando.
3. Equilibra tus comidas
Intenta mantener un equilibrio entre los diferentes grupos de alimentos en tus comidas. Incluye una combinación de carnes magras, carbohidratos complejos, grasas y frutas/verduras en abundancia. Esto te ayudará a mantenerte lleno por más tiempo y a satisfacer tus necesidades nutricionales mientras viajas.
Sin dudas que este ítem es uno de los más complejos, especialmente en itinerarios donde tienes muchísima prisa por llegar a los diferentes puntos de interés. Es allí donde el desequilibrio se vuelve moneda corriente y aparecen los alimentos ultra procesados por su velocidad de cocción o facilidad de ingesta.
4. Controla tus porciones
Es fácil excederse con las porciones cuando estás de vacaciones, especialmente cuando estás disfrutando de la deliciosa comida local. Trata de ser consciente de tus porciones y evita comer en exceso. Si comes en restaurantes, considera compartir platos con tu compañero de viaje o pedir una entrada en lugar de un plato principal.
5. Bebe mucha agua
Mantente hidratado mientras viajas bebiendo mucha agua. Lleva contigo una botella de agua reutilizable y llénala regularmente, especialmente si estás en un clima cálido o haciendo actividades físicas. Evita las bebidas azucaradas y con alto contenido calórico, como los refrescos y las bebidas energéticas, y opta por agua, té o café sin azúcar en su lugar.
6. Sé flexible e indulgente
Si bien es importante mantener una alimentación saludable mientras viajas, también es importante ser flexible y permitirte disfrutar de las indulgencias ocasionalmente. Si te encuentras con un postre irresistible o un plato local especial, no tengas miedo de probarlo. La clave está en el equilibrio y en disfrutar de la comida con moderación.
El desafío de alimentarse saludablemente en pleno vuelo
Alimentarse bien al volar representa una mayor complejidad. A miles de millas sobre el nivel del mar, las opciones se reducen considerablemente y en muchas ocasiones las aerolíneas no ofrecen demasiadas alternativas saludables incluidas en sus pasajes.
Es por ello por lo que mantener el control nutricional puede transformarse en una proeza. Por ejemplo, puedes optar por alimentos que sean suaves para el estómago y no te hagan sentir pesado durante el vuelo. Las ensaladas frescas, las frutas y los sándwiches de pavo o pollo son excelentes opciones que te proporcionarán nutrientes sin sobrecargar tu sistema digestivo.
Más allá de la duración del vuelo, una buena planificación alimentaria comienza antes del mismo. Por ejemplo, debes comer lo más liviano posible antes de viajar. De esta manera, evitarás las visitas repetidas- e incómodas- al baño del avión. Si piensas alimentarte en el aeropuerto, tómate el tiempo necesario para buscar opciones saludables que incluyan verduras y carnes magras en pequeñas porciones.
Otra conducta que debes incorporar antes del vuelo es la de permanecer en constante actividad. Sube escaleras, recorre las tiendas comerciales. Así, aumentas la motilidad de tu sistema gastrointestinal generando la eliminación de desechos antes de subir al avión.
Ten en cuenta que algunas aerolíneas ofrecen la posibilidad de escoger entre menús especiales, veganos y sin TACC. Esto es especialmente importante, ya que los platos habituales ofrecidos por las aerolíneas son demasiado calóricos. También debes evitar ingerir alcohol o demasiada cafeína en vuelo. Un tip importante es que consumas agua cada una hora de vuelo para evitar deshidratarte en viaje.
Consejos para comer bien en un crucero
A diferencia de los aviones, los cruceros son pequeñas ciudades que ofrecen una enorme variedad de opciones gastronómicas, de ocio y recreación. Dentro de estos monstruos de mar tendrás mayores tentaciones y es importante saber equilibrar la balanza calórica antes de que sea demasiado tarde.
Ante tantas opciones, la clave para alimentarse saludablemente en un crucero de lujo es cuidar las porciones. No se trata de privarte de ninguna comida, pero sí de moderar el consumo de estas. Por ejemplo, si te tentaste con carne asada o una tabla de embutidos, puedes complementar dichos platos con una porción de ensalada. Otros de los grandes enemigos nutricionales son los postres. Tan deliciosos
como calóricos, pueden generar molestias gastrointestinales cuando los consumes en exceso y cotidianamente.
Más allá de estos tips nutricionales, un punto a favor para los cruceros de lujo es que ofrece incontables opciones para realizar actividad física como gimnasios con equipamiento aeróbico, bicicletas y demás. No dejes de visitarlos para mantenerte en forma incluso en tus vacaciones.
¿Cómo comer saludablemente durante un viaje en carro?
Lejos de los cruceros y los aviones, los carros son la opción más económica para movilizarse entre diferentes destinos de interés. Es por ello por lo que suelen ser una de las opciones más escogidas por aquellos que desean disfrutar sin invertir demasiado dinero en ello.
Además de poder gestionar los tiempos de viaje, las vacaciones en carro te permiten planificar tu alimentación sin depender de nadie más. Puedes equiparte con una mini refrigeradora y alimentos frescos que te permitan saciar tu apetito mientras te mantienes en la ruta.
Procura que los restaurantes de paso y las tiendas comerciales sean la excepción a la regla. En caso de que no tengas mayor alternativa, escoge opciones poco calóricas y aléjate de la comida chatarra como hamburguesas, refrescos y papas fritas.
También debes evitar largos períodos sin alimentarte, ya que de lo contrario te expondrás a un hambre insaciable, aumentando así las probabilidades de ingerir alimentos poco saludables. En caso de que te hayas excedido en las porciones, puedes optar por el ayuno desintoxicante conformado por batidos de cítricos que te ayudará depurar todos los excesos en tu organismo.
Como verás, sin importar el medio de transporte escogido, la clave para alimentarte bien en viaje es ser moderado para controlar las porciones, investigar la cultura gastronómica de tus destinos y complementar el control alimentario con actividad física frecuente. De esta manera, no tendrás inconvenientes para disfrutar de tus vacaciones con una buena salud gastrointestinal.
Recuerda siempre consultar con un nutricionista antes de planificar un nuevo régimen dietario o como forma de prepararte de forma adecuada para tu próximo destino.
