Recientemente Marcela Vacarezza conversó con Diana Bolocco en su programa online ‘Pijama Party’, donde se confesó sobre la adopción del pequeño Benji. Señalando que cree que todo fue el destino, por lo casual que fue que se conocieran. Además de afirmar que «Yo pienso que vine a esto al mundo».
«Yo lo vine a… no te podría decir ‘a salvar’, porque eso suena muy mal, pero sí lo pienso, porque muchas veces lo miro y digo: ¿Qué sería e él si no estuviera con nosotros?, porque el Sename y el sistema de adopción en Chile tiene tantas trabas, que los niños crecen abandonados y es tremendo» agregó la comunicadora,
Siguiendo por esta línea, Marcela agregó. «No es solo un acto de generosidad, como mucha gente lo pone. Él es un regalo para mí, él es una bendición para mí, y yo creo que en parte, de lo que vine a hacer este mundo, fue para encontrarme con él, porque no había por dónde, no estábamos en el horizonte con esta opción de adopción».
El complejo proceso de adopción
A pesar de que con Rafael Araneda no tenían planes en adoptar un hijo, pero conocer al pequeño Benjamín fue amor a primera vista. Así no lo pensaron mucho para comenzar con los trámites para convertirse oficialmente en sus papás. Proceso que asegura fue muy engorroso y frío.
«Hay que hacer muchos trámites, audiencia, abogados defensores del niño, que lo defienden sin conocerlo. Son cosas bien tiradas de las mechas, pero después de dos años se hizo lo que se tenía que hacer y nos encontramos con él por algo» comentó Marcela.
En ese momento Diana Bolocco le consultó si: «¿Se pusieron en el escenario de que les dijeran que no?» A lo que la comunicadora señaló que es un proceso muy extraño, ya que previo a la audiencia de adopción ella ya lo consideraba como su hijo, es más, con el paso de los meses casi se olvido que estaban en medio del trámite.
«Sigues generando esta relación, pero después te enfrentas a Tribunales, esta cosa fría, sobre todo en pandemia, a través de una pantalla, con temas técnicos y chuta, es mi hijo, pero parece que hay que pasar por esto antes. Ahí se te enfría el corazón, porque te pueden decir que no» confesó Marcela.
